General Motors revoluciona la arquitectura eléctrica de sus vehículos para competir en la era del software
General Motors anunció una reestructuración completa de los sistemas eléctricos y computacionales de sus futuros vehículos, un movimiento estratégico destinado a posicionar a la empresa frente a competidores como Tesla y los fabricantes chinos. La transformación, presentada en un evento en Nueva York, busca dotar a los vehículos de software más rápido, funciones de conducción automatizada más avanzadas y un asistente de IA conversacional personalizado.
La primera implementación de esta nueva arquitectura debutará en 2027 con el Cadillac Escalade IQ, mientras que a partir de 2028 se convertirá en la base para todos los vehículos nuevos de GM, tanto eléctricos como de combustión. El sistema estará impulsado por el supercomputador Nvidia Drive AGX Thor, resultado de una asociación expandida entre ambas empresas anunciada en marzo.
La necesidad de modernizarse
Esta renovación técnica representa un paso necesario para que GM pueda introducir servicios innovadores como un asistente de IA conversacional o sistemas de conducción automatizada que permitirían al conductor realizar otras actividades mientras el vehículo navega por autopistas. Además, facilitará la mejora del rendimiento, corrección de problemas y adición de nuevas funciones mediante actualizaciones de software over-the-air, características que han dado ventaja competitiva a Tesla en los últimos años.
Sterling Anderson, Director de Producto de GM, explicó que desde su incorporación a la empresa en mayo ha centrado sus esfuerzos en acelerar el despliegue de esta arquitectura, destacando que aporta "mucha ventaja" en términos de ancho de banda y "un aumento dramático en la capacidad computacional".
Cambio arquitectónico fundamental
Los vehículos modernos actuales contienen docenas de pequeñas computadoras (unidades de control electrónico o ECUs) que gestionan sistemas desde entretenimiento hasta propulsión, dirección y frenado. GM consolidará estas docenas de ECUs en un núcleo computacional unificado que coordinará en tiempo real cada subsistema del vehículo. Este núcleo se conectará a tres concentradores que convertirán señales de cientos de sensores en un lenguaje digital unificado.
La plataforma computacional central conectará todos los sistemas del automóvil -propulsión, dirección, frenos, entretenimiento y seguridad- a través de una columna vertebral Ethernet de alta velocidad. GM describe esta iniciativa como una "reinvención completa" de cómo se diseñan, actualizan y mejoran sus vehículos con el tiempo.
Mejoras técnicas significativas
Según la compañía, el resultado final serán vehículos con 10 veces más capacidad para actualizaciones de software over-the-air, 1.000 veces más ancho de banda y hasta 35 veces más rendimiento de IA para funciones autónomas y avanzadas. Este enfoque sigue una trayectoria similar, aunque no idéntica, a las arquitecturas zonales empleadas por Tesla y Rivian.
La industria automotriz tradicional ha invertido años y miles de millones de dólares intentando ponerse al día con los fabricantes que adoptaron desde el inicio un enfoque centrado en el software. Existe consenso en que parte de la solución radica en modificar la arquitectura de hardware subyacente para satisfacer las crecientes demandas computacionales de los sistemas de infoentretenimiento, seguridad y conducción automatizada.
Evolución hacia el software
GM ha transitado por este camino de reinvención vehicular centrada en software durante varios años. En 2020 introdujo la Plataforma de Inteligencia Vehicular (VIP) para permitir mayor poder de procesamiento y actualizaciones over-the-air. Al año siguiente presentó Ultifi, una plataforma de software integral basada en la nube, cuyo branding aunque discontinuado permanece en los modelos más nuevos operando sobre la arquitectura VIP. En 2022, la empresa consolidó docenas de computadoras del sistema de infoentretenimiento en una única plataforma computacional.
La actual iniciativa representa la evolución natural de estos esfuerzos previos, consolidando a GM en su transformación hacia una empresa de movilidad donde el software y la capacidad computacional se posicionan como elementos centrales de la experiencia de conducción futura.